3 maneras en que Texas puede cumplir su promesa de financiar mejor nuestras escuelas públicas

Si bien el estado enfrenta una crisis presupuestaria inesperada gracias al COVID-19, esa perspectiva desafiante no debería impedirnos preservar los compromisos a largo plazo que se hicieron con la educación pública durante la última sesión legislativa.

By Bob Popinski

Director de Política
Raise Your Hand Texas

"No podemos permitir que una crisis de salud pública se convierta en una crisis educativa generacional”.

Ese fue el mensaje resonante enviado por la Agencia de Educación de Texas en una solicitud de presupuesto de dos años a la legislatura estatal que reconoció los desafíos que enfrentan nuestras escuelas debido al COVID-19 y la importancia de mantener la financiación de la educación en este momento.

Los estudiantes podrían perder entre siete meses y más de un año de aprendizaje debido a la pandemia, advirtió la agencia.

Estamos en una encrucijada, y la elección no podría ser más importante: cumplir con nuestro compromiso con la educación pública o hacer recortes que dañarán aún más a los estudiantes y maestros que ya están luchando.

Ahora es el momento de que todos nosotros, estudiantes, educadores y líderes estatales, seamos creativos. La redacción del presupuesto será más difícil debido a la economía debilitada. Sin embargo, no tenemos que deshacer el progreso logrado para los casi 5.4 millones de estudiantes de escuelas públicas en Texas.

Utilizar el Fondo de Estabilización Económica

Durante más de siete meses, COVID-19 asestó un tremendo golpe a muchos contribuyentes a la economía de nuestro estado, y los ingresos estatales se han visto afectados. El impuesto sobre las ventas, que representa alrededor del 60 por ciento de los ingresos de nuestro estado, está muy por debajo del año anterior.

El estado ya anticipa un déficit de $4.6 mil millones para el presupuesto 2020-21 y enfrenta un agujero presupuestario mayor en el presupuesto estatal 2022-23. Dicho esto, este no es el momento de entrar en pánico. Los tejanos han superado obstáculos como este en el pasado, y lo haremos nuevamente. El estado tiene $8.8 mil millones en reservas para momentos como este, y los legisladores deben usar esta opción antes de considerar cualquier recorte en nuestras escuelas públicas.

Retrasar el pago del programa escolar de la fundación

Los retrasos en los pagos pueden ser una forma práctica de hacer frente a las presiones presupuestarias grandes, inesperadas y, con suerte, a corto plazo causadas por el COVID-19. Retrasar el pago del Programa Escolar de la Fundación por un mes podría ahorrarle al estado miles de millones en el próximo presupuesto estatal

Buscar dólares adicionales de estímulo federal y enviarlos directamente a las escuelas

El actual déficit de ingresos de Texas de $4.6 mil millones sería sustancialmente mayor si no se hubieran utilizado $1.2 mil millones en fondos de la Ley CARES para ayudar a compensarlo. Las búsquedas de fondos adicionales de estímulo federal deben continuar, y deben estipular que el estado gaste los fondos futuros directamente en la educación pública.

Además de pedir que continúen los compromisos del estado con la educación pública, la solicitud de presupuesto de la TEA también pedía a los legisladores que aumentaran su inversión en programas de capacitación y reclutamiento de maestros.

Raise Your Hand aplaude esta recomendación, ya que se ha demostrado que los programas de contratación y residencia de alta calidad tienen un impacto positivo en las tasas de retención y rotación de maestros. También es de vital importancia garantizar el acceso equitativo a programas educativos efectivos que personalicen el aprendizaje y satisfagan las necesidades académicas, sociales y emocionales del niño. Debemos asegurarnos de que nuestros estudiantes estén al día y que los estudiantes desfavorecidos no se queden atrás. Este compromiso requerirá más recursos, no menos.

Detengamos las cansadas conversaciones sobre los recortes de programas y las reducciones generalizadas incluso antes de que comiencen. Podemos hacerlo mejor para nuestros estudiantes, debemos hacerlo. Cueste lo que cueste, debemos luchar para evitar que nuestros estudiantes se queden atrás y garantizar que las promesas y el progreso logrado no se deshagan. Debemos priorizar las necesidades de todos los estudiantes de Texas, nuestra futura fuerza laboral, así como también las de nuestros maestros, escuelas y comunidades. Nuestro futuro depende de ello.

Involúcrese

El futuro de Texas, nuestras comunidades, nuestra economía, nuestra ciudadanía, depende de qué tan bien preparemos a todos los estudiantes hoy. Apoyar y fortalecer nuestras escuelas requiere de todos nosotros. Involúcrese para mantenerse informado sobre temas educativos importantes y únase a miles de tejanos para apoyar a nuestras escuelas públicas.

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